El domingo pasado, junto a Àurea, estuve en el Montseny, previendo posibles buenas condiciones para hacer fotos de bosque... o sea: lluvia.
Lo que pasa es que ni con el mal tiempo tengo suerte, jeje.
Llegamos aún de noche, con una tormenta tremenda inundándolo todo... y decidimos esperar que pare un poco, y a ver si entran nieblas...
Pero no. De hecho, sale el Sol, jeje.
Es una gozada estar en el bosque mientras llueve, sale el sol, huele a tierra mojada, a descomposición, a vida.
Las salamandras empiezan a esconderse, y empieza a llegar gente... Pero no mucha, con el mal tiempo...
Decidimos dar un paseo por el embalse de Santa Fé, ya que pocas esperanzas de hacer fotos... pero justo en ese momento, entra la niebla, y nos pilla al lado de las dos hayas del embalse, posiblemente las hayas más fotografiadas de Cataluña, y como no sabemos lo que durará la niebla, decidimos asegurarnos el tiro.
Sólo un par de minutos, cuatro encuadres "a vista"... y la niebla se va, y se nos quedan ganas de más. Pero así son las cosas.
Después bajamos por el torrente, disfrutando de cada saltito de agua, del murmullo de las hojas al viento, el rumor del agua, y la soledad de estos días "desapacibles"... va lloviendo a ratos. A ratos sale el Sol.
Me encanta este lugar, con las rocas graníticas tan esculpidas por el agua, con esos brillos que destilan humedad en las fotos.
Pensaba en buscar nuevos rincones, pero la verdad es que es fácil acabar en los mismos de siempre, que como un imán, te atraen, te llaman como el canto de las sirenas, irresistibles.
Antes de bajar a la riera, en otro rincón de la zona, nos encontramos con un buen grupo de fotógrafos de FOTONATURA, de la Quedada del Montseny, que suelen hacer un par de veces al año. Aunque este año son pocos, algunos de ellos se han quedado en casa, con la que ha caído por la noche, ¿estamos locos? jeje.
Y con ganas de más... Se despide un servidor.
Lo que pasa es que ni con el mal tiempo tengo suerte, jeje.
Llegamos aún de noche, con una tormenta tremenda inundándolo todo... y decidimos esperar que pare un poco, y a ver si entran nieblas...
Pero no. De hecho, sale el Sol, jeje.
Es una gozada estar en el bosque mientras llueve, sale el sol, huele a tierra mojada, a descomposición, a vida.
Las salamandras empiezan a esconderse, y empieza a llegar gente... Pero no mucha, con el mal tiempo...
Decidimos dar un paseo por el embalse de Santa Fé, ya que pocas esperanzas de hacer fotos... pero justo en ese momento, entra la niebla, y nos pilla al lado de las dos hayas del embalse, posiblemente las hayas más fotografiadas de Cataluña, y como no sabemos lo que durará la niebla, decidimos asegurarnos el tiro.
Sólo un par de minutos, cuatro encuadres "a vista"... y la niebla se va, y se nos quedan ganas de más. Pero así son las cosas.
Después bajamos por el torrente, disfrutando de cada saltito de agua, del murmullo de las hojas al viento, el rumor del agua, y la soledad de estos días "desapacibles"... va lloviendo a ratos. A ratos sale el Sol.
Me encanta este lugar, con las rocas graníticas tan esculpidas por el agua, con esos brillos que destilan humedad en las fotos.
Pensaba en buscar nuevos rincones, pero la verdad es que es fácil acabar en los mismos de siempre, que como un imán, te atraen, te llaman como el canto de las sirenas, irresistibles.
Antes de bajar a la riera, en otro rincón de la zona, nos encontramos con un buen grupo de fotógrafos de FOTONATURA, de la Quedada del Montseny, que suelen hacer un par de veces al año. Aunque este año son pocos, algunos de ellos se han quedado en casa, con la que ha caído por la noche, ¿estamos locos? jeje.
Y con ganas de más... Se despide un servidor.